La cultura del vino está cada vez más extendida en nuestra cultura. Cada vez son más personas las que se interesan por el proceso de elaboración, los tipos de vinos y todos los conceptos que esconde la enología. Debido a este boom, se ha puesto en auge una nueva forma de turismo, el enoturismo.
El enoturismo va más allá de visitar una bodega y conocer sus vinos, o hacer una simple cata en un restaurante de tu ciudad. Es una experiencia muy completa y enriquecedora, con la que aprenderás todos los secretos en la elaboración del vino, cómo se conserva en la barricas y el resto de procesos hasta que llega a nuestra mesa.
Una forma diferente y muy interesante de disfrutar del turismo. Originalidad, tradición, desarrollo, innovación y calidad son las características que envuelven al enoturismo. Si quieres optar por este tipo de turismo, te aconsejo aprovechar unos días y hacer un viaje en el que puedas aprovechar para hacer las llamadas rutas del vino.
Además de la cultura del vino, podrás disfrutar de la historia, los paisajes y la naturaleza que envuelve estos enclaves tan bucólicos. El enoturismo está rodeado de muchos otros servicios como es la gastronomía típica de cada zona, que no puede faltar para hacer un buen maridaje con los vinos que estés probando. Hoteles, casas rurales y hostales, harán que tu estancia sea mucho más confortable y acogedora.
Si te gusta el vino y quieres aprender más sobre él, el enoturismo es un plan perfecto para realizar con tu pareja o amigas.